Llega el cargador universal USB-C a la UE. ¿Y ahora qué?

Tras más de dos lustros de negociaciones, el cargador universal USB-C llegará a los hogares de la Unión Europea a finales de 2024. Desde otoño de ese año, los ciudadanos ya no tendrán que preocuparse por portar un cargador para cargar cada dispositivo electrónico.

Esta medida ha sido aprobada por el Parlamento Europeo y obligará a todos los fabricantes de electrónicos comercializados bajo el amparo de los 27 a adaptar sus terminales al conector USB-C. Este tipo de clavija es ya conocida en la sociedad puesto que muchos de los aparatos actuales lo emplean como conector de auriculares, cargador de altavoces o de móviles.

Uno de los propósitos de la Eurocámara con esta medida obligatoria para los veintisiete Estados de la Unión es evitar la contaminación electrónica al medio ambiente generada por los desechos tecnológicos (basura tecnológica) que los ciudadanos vertemos anualmente, independientemente de que se reciclen los aparatos en los puntos limpios. Estos desechos suponen casi 11.000 toneladas cada año.

Igualmente, esta medida supondrá un ahorro de casi 600 toneladas en materias primas y más de 200 millones de euros por año (gasto medio de los europeos en cargadores) ya que solo se necesitará un cargador para todo -y para todos-. Disposiciones que los mercados europeos agradecerán dada la inestabilidad candente generada por las contiendas en el este del continente y que mantienen a la Eurocámara en vigilia perenne.

Pero… ¿Qué pasa con los ordenadores portátiles?

Por otro lado, serán quince los tipos de dispositivos que se adapten al USB-C en 2024, entre los que se incluyen productos pequeños y medianos como móviles, ratones y teclados, altavoces y auriculares, libros electrónicos o videoconsolas portátiles.

Y hablando de portátiles, los ordenadores tendrán entre 16 y 18 meses, hasta primavera de 2026, para completar la operación.

Lightning vs. USB-C: Apple tendrá que adaptarse

Desde el año 2009, la idea de universalizar los conectores electrónicos ha estado sobre la mesa del Parlamento Europeo sin éxito aparente. Tras más de una década de negociaciones, la medida se ha aprobado a comienzos de octubre de este 2022.

Sin embargo, Apple ha estado en contra de unificar los cargadores dado que la compañía de la manzana mordida utiliza en sus dispositivos portátiles pequeños el conector Lightning, que es muy diferente del USB-C y, además, exclusivo de Apple. No obstante, el Parlamento Europeo ha obligado a los de Cupertino a acatar la norma común si desean vender sus productos dentro de la Unión.

¿Hecha la ley, hecha la trampa?

No obstante, siempre han existido formas de sortear una ley. Esta medida -obligatoria-, afecta a todos los fabricantes y a todos los dispositivos -sin excepción- que se comercialicen en la Unión Europea.

Ahora el “problema” reside en la picardía de algunas compañías dado que podrían imponer los cargadores inalámbricos como método principal de carga de sus dispositivos obviando así al conector USB-C.

Pero la Comisión Europea augura que para 2024 se estandaricen también los modelos de carga inalámbrica. Esta estandarización será independiente a la obligatoriedad de incluir un puerto de carga USB-C. Por tanto, compañías como Apple, que ha sido la más “peleona” en este punto, no podrá sortear el “tipo C” por un cargador inalámbrico, aparentemente.

Por tanto, desde el corazón de Europa, aseguran que no habrá manera de evitar esta adaptación. Pero resaltan la posibilidad de que alguna compañía ponga trabas a través de los tribunales para retrasar así la implementación de esta medida no exenta de polémica, pero beneficiosa para el ciudadano.

Ventajas del USB-C

Seguro que has ido a casa de algún conocido, te has quedado sin batería en tu teléfono, pides un cargador y… ¡Sorpresa! No funciona porque es incompatible con el fabricante de tu dispositivo. Estas situaciones ocurren a diario y son un verdadero engorro.

Los primeros en beneficiarse de esta medida serán los ciudadanos:

• Lo primero de todo es la comodidad de tener un solo cargador para varios dispositivos electrónicos diferentes, independientemente del fabricante.

• Todos los cargadores tendrán la misma potencia. Es decir, se atenuará la carga rápida por lo que ya no habrá cargadores de primera o de segunda. Todos los aparatos se podrán cargar a la misma velocidad, siempre y cuando el cargador sea compatible.

• Menos cables, más comodidad: ahora, el ciudadano ya no tendrá su casa llena de cables enredados como si la mesita de noche fuera un árbol de navidad. Con un solo cable-cargador USB-C será suficiente para alimentar la Tablet, el móvil, los cascos o el ratón del PC.

En definitiva, la compatibilidad total del puerto tipo C abrirá una “nueva era” tecnológica en la que los consumidores serán los principales beneficiarios sin importar a qué fabricante es leal.

En Vacolba nos interesan las opiniones de los ciudadanos. Por ello, queremos saber qué opinas sobre la obligatoriedad del cargador universal dentro de los territorios de la UE para todos lo fabricantes.

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