Los tokens no fungibles (NFT) se han convertido actualmente en el activo más codiciado en Internet después de las criptomonedas. Sin embargo, no todo lo que rodea a los NFT es bueno. La inversión en bienes digitales ha supuesto que muchos hackers estén al tanto de este negocio para estafar y devaluar estos activos. Más aún, después de que estos archivos digitales generaran un volumen de transacciones mundiales superiores a los 40 mil millones de dólares a finales de 2021.
¿Qué son los NFT y para qué sirven?
Estos tokens nacieron en el año 2014 de la mano del blockchain y las criptomonedas. Los NFT son activos digitales encriptados, únicos, intransferibles e indivisibles. El primer token no fungible fue creado por el artista Kevin McCoy y se llamó Quantum. Desde entonces, estos NFT han estado inmersos en el entorno digital y poco a poco se han convertido en una revolución virtual.
No obstante, la tecnología que está detrás de estos bienes digitales responde a la criptografía, pues este sistema permite dotar de exclusividad absoluta a los NFT. Es precisamente esta protección de la información la que les otorga tal privilegio bajo el paraguas del blockchain.
Igualmente, los usos del los NFT son variopintos y son aplicables a los videojuegos, la moda, el deporte, etc. Al llegar, pues, a tantos campos de actuación, el interés por estos bienes digitales se ha disparado. Incluso Eminem o Madonna ya tienen un NFT único y exclusivo. También Cristiano Ronaldo recientemente ha firmado una colaboración con el «Exchange» de la mano del sistema de software Binance y que se lanzará el 18 de noviembre. Estos NFT del exmadridista representarán un momento icónico de su vida.
Por otra parte, estos tokens pueden “materializarse” en el entorno digital mediante textos, audio, imagen o video. De esta manera, se representan objetos reales en un entorno virtual. Por tanto, el uso real que se le puede dar a los NFT sería como una colección virtual personal codificada, única y con identidad propia regulada bajo una especie de DNI digital para cada token creado o comprado.
Auge de los Non-Fungible Tokens
Las inversiones en bienes digitales de este tipo no han dejado de aumentar desde su creación en 2014, pero no ha sido hasta el año pasado, 2021, cuando “pegaron el estirón”.
Los NFT se consideran las obras de arte virtuales del momento por su similitud con este tipo creaciones tangibles, pero trasladadas a un mercado de arte paralelo en el entorno digital.
Los tokens se pueden encontrar en plataformas como Rarible u OpenSea, que es una de las más aclamadas, y no es para menos puesto que reúne más de 80 millones de NFTs, la mayoría de ellos relacionados con el sector de los videojuegos.
En suma, el mercado de este tipo de tokens está en alza y muchas personas observan que se trata de un espacio apenas explorado donde existen oportunidades rentables para invertir en tokens no fungibles. De todas maneras, el mercado de estos NFT no está regulado y, por ello, aún no se ha determinado un marco jurídico específico para este tipo de inversiones con unas garantías mínimas más allá del blockchain.
Igualmente, otra de las cuestiones que rodean el marco de los NFTs es si existe una burbuja en Internet. En los últimos meses estos activos digitales no han transitado precisamente por el buen camino dada la incertidumbre especulativa que acumulan desde hace semanas. Sin embargo, The Wall Street Journal publicó un reportaje de investigación cuyos resultados arrojaron que los bienes digitales no fungibles estaban siendo víctimas de una alteración desmedida en los precios de estos activos. El tiempo dirá si explota una burbuja en la compraventa de estas divisas virtuales.
¿Compensa invertir en NFT?
Dado que el dinero que una persona esté dispuesta a invertir en NFT determina su precio final, como en una subasta, la demanda de estos activos hace que el precio de los NFTs aumente si se trata de bienes escasos. Aun así, los precios de estos tokens no se están analizando y estudiando cómo se debiera al tratarse de un bien especulativo sin una base sólida que asegure su valor en el entorno digital.
Sobre si es rentable o no invertir en estos bienes digitales, la respuesta no está clara ni es unánime entre los expertos puesto que se trata de un mercado volátil, especulativo y repleto de fisuras, aunque es recomendable invertir en aquellos NFTs con una mayor liquidación puesto que, gracias a ello, cuentan con un alto volumen de negociación.
Sin ir más lejos, el pasado viernes 11 de noviembre el Exchange FTX entró en quiebra tras reconocer graves problemas de liquidez y, después del anuncio, los clientes retiraron sus fondos de FTX dejando a la plataforma de criptomonedas en bancarrota. FTX fue hasta la semana pasada una de las plataformas más importantes e influyentes en el mercado de las divisas virtuales y su quiebra ha arrastrado hacia la incertidumbre al mercado internacional de los cryptoactivos. Asimismo, FTX era uno de los patrocinadores de la escudería Mercedes en Fórmula 1 y de su principal piloto, Lewis Hamilton. Por el momento, la escudería de Brackley ha suspendido el acuerdo con este Exchange. No obstante, otros Exchange como Binance, patrocinador de la escudería francesa de Fórmula 1 Alpine, han rechazado rescatar a FTX dada la elevada probabilidad de que la reputación y valor bursátil de Binance se viera afectado.
Además de llegar hasta el mundo del deporte dados lo millonarios patrocinios que soportaban, la declaración de bancarrota de FTX ha provocado un tornado dentro del mercado de las divisas virtuales dejando aún más la volatilidad e incertidumbre en el aire.
Qué riesgos entrañan estos activos digitales
Cuando algo adquiere en Internet una fama aparentemente consolidada pero sin rumbo fijo, los ciberdelincuentes emergen para hacer de las suyas y el mundo de los tokens no fungibles no se queda atrás.
Sin ir más lejos, el Marketplace OpenSea, que es uno de los lugares de referencia para quienes quieran comprar un NFT, advirtió a sus seguidores de que gran parte de los NFTs que se venden o mintean – que es acuñar o validar un NFT-, en su web son estafas. Concretamente, aseguran que el 80% de estos activos exclusivos son falsos, están plagiados o, directamente, son spam.
Es por ello que los ciberdelincuentes emplean las siguientes técnicas para defraudar al internauta:
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Phishing
Cualquier persona interesada en adquirir un NFT puede recibir un correo electrónico en el que se exigen contraseñas de la billetera virtual del usuario. Es decir, te piden tus claves de tu banca online. Esto sucede porque para comprar un NFT es necesario tener una billetera criptográfica y es en este punto cuando los malhechores de Internet atacan al internauta haciéndole creer que se encuentra ante una verificación de su cuenta a través de un enlace para adquirir un NFT. Pero en realidad lo que sucede es que ese enlace es falso y sirve para robar datos personales, por ejemplo los bancarios, para estafar.
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Pump and Dump
Inflar y tirar es otro tipo de estafa relacionada con los tokens no fungibles. Este método consiste en inflar artificialmente el mercado mediante esquemas que promueven la demanda al comprar NFTs internacionales para aumentar a propósito su valor. Una vez que el precio de estos tokens aumenta hasta que estimen necesario para operar esta estafa, entran en juego los compradores que pujan por algo que realmente no tiene el valor que describen porque ha sido adulterado. De esta manera, los defraudadores mintean esos tokens a un precio mucho más elevado del valor original de un NFT y el comprador piensa que obtiene un token muy demandado y con un alto valor, cuando en verdad está adquiriendo un activo digital sin apenas aprecio en el mercado.
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Reventa
Los NFT se pueden revender en los mercados secundarios que operan con estos activos. Los estafadores suelen cambiar a última hora la moneda de cambio de la operación por otra de menor valor para que, de esta manera, el comprador pierda dinero al devaluarse la criptomoneda con la que recibe los beneficios de la venta de su NFT.
Estos son solo algunas de las numerosas técnicas que emplean los ciberdelincuentes en el mundo digital de los tokens no fungibles. Por el momento quedan tareas pendientes para un entorno especialmente atractivo para los inversores dado el flujo casi instantáneo de ganancias que pueden conseguir, aunque las pérdidas pueden ser mayores. El tiempo lo dirá.
Qué usos pueden dar las empresas a los NFT
Las empresas llevan tiempo fijándose en el Metaverso y los NFTs forman parte de él. Por tanto, es comprensible que las corporaciones se fijen en estos activos para comercializar con ellos dado el potencial futuro que promete ese mundo virtual porque todos quieren estar a la moda.
Por otro lado, se estima que la transformación digital genere experiencias con Realidad Aumentada y Realidad Virtual donde los NFT se puedan emplear como moneda de cambio dado que también puede ser una criptomoneda bajo el blockchain de Ethereum y con la “garantía” del Smart Contract.
En Vacolba nos importan las opiniones de nuestros lectores. Es por ello que nos gustaría leer tus comentarios acerca de los NFTs. ¿Qué piensas sobre esta divisa virtual?