¿Cómo nos entretendremos en el futuro?

¿Cómo nos entretendremos en el futuro?

La virtualización es una tecnología que permite crear entornos simulados por ordenador que pueden ser experimentados por los usuarios como si fueran reales y se puede aplicar a diferentes ámbitos, como la educación, la salud, el trabajo o el ocio.

El entretenimiento es parte fundamental de la vida humana. Nos ayuda a escapar de la rutina, a expresarnos, a conectar con otras personas y a desarrollar nuestra creatividad.  También puede tener beneficios para nuestra salud mental y física, ya que reduce el estrés, mejora el ánimo y estimula el cerebro.

Una de las formas en las que podemos entretenernos es a través de la virtualización ya que ofrece una nueva forma de entretenimiento que supera las limitaciones del mundo real. Por ejemplo, la realidad virtual (VR) nos permite sumergirnos en escenarios tridimensionales que podemos explorar e interactuar con ellos mediante dispositivos como gafas, cascos o guantes y, por otra parte, la realidad aumentada (AR) nos permite ver elementos virtuales superpuestos al mundo real mediante dispositivos como smartphones, tabletas o gafas. También tenemos la oportunidad de experimentar la realidad mixta (MR), pues nos permite combinar ambos tipos de tecnología y crear experiencias híbridas.

Estas tecnologías pueden aplicarse a los videojuegos, el cine, la música, el arte, el deporte o el turismo. Algunos ejemplos son:

  • Los videojuegos virtualizados nos permiten vivir aventuras en primera persona, como si fuéramos los protagonistas de una película o un libro. Podemos viajar a otros mundos, luchar contra monstruos, resolver misterios o simplemente disfrutar de la naturaleza.
  • El cine aplicado a esta tecnología nos permite ver películas desde diferentes ángulos y perspectivas, como si estuviéramos dentro de la escena. Podemos elegir qué personaje seguir, qué parte de la historia ver o incluso cambiar el final.
  • La música de VR nos permite asistir a conciertos virtuales de nuestros artistas favoritos, como si estuviéramos en primera fila. Podemos interactuar con ellos, bailar con otros fans o incluso subir al escenario.
  • El arte crea obras artísticas en espacios virtuales, usando herramientas como pinceles, lápices o spray. Podemos dibujar en el aire, pintar sobre superficies imaginarias o esculpir formas tridimensionales.
  • El deporte vivido mediante la VR permite practicar actividades físicas en entornos virtuales, como si estuviéramos en un gimnasio o en una pista y podemos correr, saltar, nadar o jugar a diferentes juegos con otros usuarios o contra la máquina.
  • También el turismo tiene su espacio en el entorno virtual y esto nos traslada a lugares lejanos o inaccesibles, como si estuviéramos allí. Podemos recorrer ciudades históricas, monumentos famosos o paisajes naturales sin salir de casa.

La virtualización cambia la forma en la que nos entretenemos

Las nuevas tecnologías nos ofrecen espacios inexplorados para la mayoría de los mortales y nos permiten disfrutar de experiencias únicas a través de estas realidades ficticias. Algunas de las estas experiencias son:

  • Inmersión y la emoción, haciéndonos sentir más conectados con lo que vemos y hacemos.
  • Personalización de nuestro entorno virtual.
  • Democratización de experiencias “inalcanzables».
  • Mejora del aprendizaje y la creatividad mientras adquirimos nuevos conocimientos y habilidades.

Sin embargo, la virtualización también tiene sus riesgos si no se compaginan bien con el mundo real, que es donde las personas deben planificar sus objetivos vitales.

Riesgos de la realidad virtual y aumentada

Como hemos comentado, este tipo de avances tecnológicos son espectaculares y muy atractivos, pero debemos ser precavidos cuando las usemos.

Por ejemplo:

  • Puede provocar adicción y aislamiento social, si abusamos de las experiencias virtuales y descuidamos las relaciones con el mundo real y con otras personas.
  • Confusión y desorientación, si no somos capaces de distinguir entre lo real y lo virtual, o si nos afectan los efectos secundarios como el mareo o el cansancio.
  • Puede causar problemas legales si no respetamos los derechos del resto de usuarios.

Así que, ya sabéis, la virtualización puede cambiar el entretenimiento de forma positiva o negativa, dependiendo del uso que le demos. Es por ello que, aunque el mundo virtual nos tiente, no debemos perder el norte de nuestra vida real, que es donde vivimos.

¿Te gustaría probar el entretenimiento en un entorno virtualizado?

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